NUEVA YORK._ La Procuraduría General del Estado de Nueva York, arrestó a la cajera dominicana Nadia Figueroa y su jefe Tyrone Lee, a quienes acusa de fraudes a 123 sucursales del banco Wachovia (Wells Fargo) en varios estados, robando alegadamente más de $457.000 dólares.
Las oficinas bancarias estafadas se ubican en Nueva York, Connecticut, Maryland, New Jersey, Virginia y Florida.
Figueroa, se encargaba de entregar el dinero a sujetos que formaban parte de una red de robos de identidad y ambos, habían sido arrestados anteriormente por el mismo delito contra el banco Wachovia (ahora Wells Fargo) en el condado de Westchester en Nueva York.
“Los nuevos arrestos de hoy demuestran que el robo de identidad sigue siendo un problema cada vez mayor y que todos debemos redoblar esfuerzos para garantizar que nuestros datos personales estén seguros", dijo el Fiscal General Schneiderman.
"Mi oficina continuará tomando medidas contra cualquier persona que ponga en peligro la seguridad financiera de los neoyorquinos - incluyendo cajeros de bancos que se aprovechen de la confianza de los clientes y vamos a seguir trabajando para proteger a todos, desde grandes corporaciones, a las pequeñas empresas y las familias, de esta amenaza”, agregó el funcionario judicial en un comunicado.
El expediente actual de la Fiscalía General, sometido en la Corte Suprema del Condado de Orange, acusa a Lee, de 28 años, y Figueroa de 24, residentes en El Bronx, de los delitos de Hurto Mayor en Segundo Grado, Hurto Mayor en Tercer Grado, Robo de Identidad en el Primer Grado, y el Plan para Defraudar en Primer Grado, por su conducta entre julio del 2010 y agosto del 2011.
Si son declarados culpables de los cargos principales, los acusados se enfrentan a hasta 15 años de prisión.
En la acusación del Fiscal General se alega que Figueroa, mientras trabajaba como cajera en una sucursal de Wachovia Bank, ubicada en el 41 Norte de la calle Plank Road en Newburgh, (Nueva York), ilegalmente accedió y se robó números de cuentas bancarias y de identificación personal de más de 200 víctimas de una sucursal situada en ese suburbio.
De acuerdo con las declaraciones hechas por los fiscales en la lectura de cargos, muchas de las cuentas de víctimas fueron seleccionadas por una práctica conocida como "pescando nombres" que Figueroa buscaba ilegalmente en la base de datos de clientes de Wachovia con nombres comunes, estados de residencia, y los saldos altos de las cuentas.
Lee supuestamente utilizó la información robada para retirar fondos de 77 cuentas de los clientes de las sucursales situadas en el Condado de Orange, Condado de Nassau, Nueva York, así como en Connecticut, Florida, Maryland, Nueva Jersey y Virginia.
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